Cartel Sastre UCLM-RFT

SOBRE EL CONFERENCIANTE

Licenciado en Ciencias Geológicas y Doctor en Hidrogeología por la Universidad Complutense de Madrid.

Investido Doctor Honoris Causa por la Universidad Autónoma de Baja California, es autor o coautor de una treintena de publicaciones científicas entre las que destacan diferentes estudios en los que intervienen procesos de hidrogeosedimentación, aspectos medioambientales, tróficos e hidrológicos, el uso de agua regenerada, la calidad de las aguas subterráneas o sobre el uso y disfrute de la naturaleza en relación a la didáctica de la Geológía.

Profesor Titular de Geodinámica Externa, adscrito al Departamento de Geología, Geografía y Medio Ambiente de la Universidad de Alcalá, del que ha sido Director en diversos mandatos.

Impulsor de los estudios de Ciencias Ambientales en la Universidad de Alcalá, como Licenciatura primero y como Grado después, habiendo sido Decano fundador de la Facultad de Ciencias Ambientales de la misma (la primera en España, junto con la de Granada y Autónoma de Barcelona en incorporar estos estudios como una enseñanza oficial).

En la actualidad imparte las asignaturas de “Hidrología e Hidrogeología”, ”Técnicas Aplicadas a los Trabajos de Campo”, “Gestión y Conservación de los Recursos Naturales” (Gestión del Agua) y “Evaluación el Impacto Ambiental” en el Grado en Ciencias Ambientales de la Universidad de Alcalá.

Su labor investigadora ha estado centrada en la incidencia ambiental de las aguas subterráneas y, particularmente en los humedales, siendo autor de un buen número de publicaciones, una parte de ellas en revistas científicas indexadas.

Ha desarrollado una intensa labor de investigación cooperativa con diversos países iberoamericanos, particularmente Argentina y México, país éste que en los últimos diez años viene polarizando su actividad de cooperación académica y científica internacional. En los últimos dos años se ha unido a aquéllos la República de Ecuador.

Ha sido director de los cursos de especialización sobre Gestión del Medio Ambiente y de los Recursos Naturales, organizados por el Instituto Nacional de la Administración Pública (antiguo Ministerio de Administraciones Públicas) y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, dirigidos a funcionarios de las diversas administraciones ambientales de los países iberoamericanos.

En la actualidad es Presidente de la Asociación “Ojos del Guadiana Vivos”, cuya actividad se centra en la salvaguarda de los humedales manchegos en general y de las Tablas de Daimiel en particular.

 SINOPSIS

Las aguas subterráneas en la cuenca del Tajo han jugado un papel destacado en la satisfacción de las demandas del abastecimiento urbano, tanto de núcleos de población relevantes –como el propio caso de la ciudad de Madrid- como de poblaciones rurales de menor entidad, además de ser utilizadas para transformaciones en regadío de pequeño o medio calado. No obstante, en los últimos años ha ganado terreno el recurso a las aguas superficiales para estos menesteres. Sin embargo, el conurbano de Madrid sigue contando con las aguas subterráneas para afrontar los episodios de sequías, que se anuncian como cada vez más frecuentes y acusadas según todas las previsiones de variación climática futura a medio plazo.

Frente a esta consideración tradicional como recurso hídrico, en los últimos años ha ido cobrando cuerpo la consideración de las mismas como patrimonio ambiental, del que dependen muchos paisajes del agua y genuinos humedales que aunque no puedan ser considerados como espectaculares, si contribuyen a un notable grado de biodiversidad en el territorio de la demarcación. Las declaraciones de protección que las administraciones competentes han promovido y, más recientemente las derivadas de la vertebración de la Red Natura 2000, precisan integrar con efectividad los condicionantes hídricos de esos espacios protegidos en el plan de gestión (2016-2021) del agua de la cuenca recientemente aprobado, configurándose tal propósito como un objetivo significado de aquél.

Por otro lado, los sistemas de captación de las aguas subterráneas emergentes desde las diferentes unidades hidrogeológicas, habilitados en la cuenca desde el tiempo de los romanos y, muy especialmente durante la presencia árabe, configuran un notable patrimonio cultural que ha merecido en algunos casos su protección como Bienes de Interés Cultural propiamente dichos.